Eran Feigenbaum es el Director de Seguridad de Google Apps desde 2007 y hoy ha estado en Madrid para explicar por qué las empresas deberían dar el salto al cloud computing y olvidarse de una vez por todas de sus viejos y en ocasiones obsoletos data centers.
Entre los argumentos a favor de «la nube» Feigenbaum destaca el enorme ahorro de costes para las empresas que apuestan por soluciones como Google Apps y sobre todo por una mayor seguridad, que garantizan por contrato.
Después de asistir a la presentación del director de seguridad de Google Apps que tuvo lugar en la oficinas que Google tiene en la Torre Picasso de Madrid, en MuyPymes reforzamos nuestra convicción de que la próxima batalla entre los gigantes del software se va a jugar casi exclusivamente en la Red. Está claro que Google quiere ganar la batalla del marketing, y está haciendo un gran hicapié en que las bondades de sus Google Apps sean conocidas y se difundan en los medios de comunicación de medio mundo.
Otra de nuestras convicciones, es que uno de los mayores recelos que sienten los empresarios cuando oyen hablar de cloud computing es el de la seguridad. Presentaciones como las realizadas por Feigenbaum hoy en Madrid sirven precisamente para eso: asegurar a los empresarios que sus datos están más seguros en los servidores de Google que en los de su propia empresa. ¿Están en lo cierto los responsables de la empresa de Mountainview? Nosotros estamos convencidos de ello, pero vayamos por partes.
Problemas de seguridad en las empresas
Disponibilidad de los datos
Uno de los problemas que más preocupa a los responsables IT de las empresas en materia de seguridad es el poder controlar dónde se encuentra la información sensible de la empresa, y como evitar fugas de información.
En este sentido, la popularización de las unidades flash y los ordenadores portátiles, ponen en muchas ocasiones en riesgos la seguridad de las compañías. Tal y como explica el responsable de Google, «en un periodo de seis meses en 2008, los pasajeros de los taxis londinenses se dejaron más de 60.000 dispositivos móviles olvidados en los taxis de la ciudad, incluyendo ordenadores, teléfonos y memorias USB. Un porcentaje muy elevado de estos dispositivos contenían información corporativa confidencial» .
Mantenimiento y actualización de las aplicaciones
Por otro lado, las empresas invierten una gran cantidad de tiempo y dinero en mantener actualizadas las aplicaciones utilizadas por sus usuarios, de forma que no presenten vulnerabilidades que puedan ser explotadas por hackers o ciberdelincuentes. Sin embargo para Feigenbaum, esto además de ser un sistema muy costoso, resulta tremendamente ineficaz.
El responsable de seguridad de Google Apps explica en este sentido que «se tardan de 25 a 60 días» en estudiar e implementar cualquier nuevo parche de seguridad en una empresa. En caso de que la actualización sea crítica, esta demora puede llegar hasta los seis meses, y durante este tiempo la empresa queda desprotegida ante cualquier tipo de ataque» .
Seguridad física de los servidores
Finalmente los responsables tecnológicos de las empresas han de lidiar con los «riesgos físicos» a los que se enfrentan los servidores de cualquier empresa. ¿Cómo luchar contra un posible incendio en las instalaciones de una compañía? ¿Y si un trabajador «despechado» decide vengarse saboteando los servidores de la empresa? ¿Cuánto debemos invertir en caso que nuestro data center sufra una avería grave de hardware?
Google Apps como posible solución
Frente a estos problemas y amenazas el cloud computing y las aplicaciones basadas en la nube, ofrecen según Feigenbaum no sólo mayor seguridad, sino que «se incrementa la productividad ya que la información siempre está accesible, independientemente del equipo que utilicemos». En este sentido Google Apps comparte la mayoría de las ventajas de los proveedores de aplicación on-line que son:
Ahorro de coste para las empresas, que ya no tienen que pagar por licencias de software y sus actualizaciones sinopor una suscripción que les da acceso a un conjunto de aplicaciones que mejoran constantemente sin que los responsables IT tengan que intervenir.
Mayor movilidad de los trabajadores que pueden trabajar desde cualquier parte del mundo que tenga una conexión a Internet. Desaparece la necesidad de llevar con nosotros memorias flash o portátiles. La copia de seguridad de nuestros datos siempre está en la nube.
Mayor seguridad. En el caso de Google, la compañía dispone de una amplia red de servidores que replican nuestros datos, tanto en un mismo Data Center, como en otros Data Centers situados en otros países. Desaparece por completo la posibilidad de perder nuestros datos. Incluso en caso de borrado accidental, Google nos ofrece la posibilidad de recuperar nuestro correo electrónico hasta un horizonte de diez años atrás.
Sin embargo, como toda solución tecnológica, Google Apps no es perfecta, y dispone de algunas limitaciones. La primera y más evidente es que para que todo funcione correctamente necesitamos una conexión a Internet, y que no haya problemas en la misma. Además, a veces son los servidores de Google los que tienen problemas, lo cual puede repercutir en nuestro trabajo.
Aún así, y teniendo en cuenta que Google ofrece un servicio de mantenimiento a sus usuarios de pago 24/7 y que por contrato indemniza a las empresas en caso de problemas técnicos, se nos antoja que Feigenbaum está en lo cierto: «el cloud computing no es el futuro, sino un cada vez más sólido presente».