Durante las últimas semanas estamos llevando a cabo una campaña de concienciación sobre el uso del DNI electrónico entre nuestros lectores, explicando sus ventajas y sus usos, en consonancia con el esfuerzo que se realiza desde las Administraciones Públicas.
Hoy sin embargo queremos conocer de cerca la opinión de las personas que ya han tenido la oportunidad de «trabajar» con su nuevo dispositivo, tantos las positivas como las negativas. ¿Quieres conocer qué es lo que piensan los ciudadanos?
Como hemos señalado en ocasiones anteriores, una de las cosas que más nos siguen llamando la atención es que sigue habiendo una gran desconocimiento sobre el uso del DNI electrónico, tanto por parte de los ciudadanos como por parte de las empresas, muchas de las cuales siguen viéndolo más como un «engorro» que como una oportunidad para ahorrar tiempo en ciertos procesos administrativos.
Sin embargo como coméntabamos en la introducción del artículo, hemos querido recabar la opinón de las personas que ya lo están utilizando, o que almenos lo han intentado en alguna ocasión.
Quizás, después de hablar con algunos ciudadanos, el principal problema que se le puede achacar es que su uso no es tan intuitivo como se asegura desde el Ministerio de Industria. Así ciudadanos como Javier, jubilado de Madrid comentan que no acaban de «aclararse con el certificado digital» ya que «siempre me está pidiendo las claves, y muchos servicios que anuncian como operativos no funcionan correctamente» .
Otro de los problemas que suele achacarse a este instrumento de identificación digital es que es un tanto caprichoso con la tecnología que empleamos.
Tal y como se comenta en muchos foros de Internet, mientras que si se usa con Microsoft Windows y con Internet Explorer la mayoría de los lectores no dan muchos más problemas que los de aprender a gestionar nuestra firma digital, la cosa cambia cuando utilizamos otros sistemas operativos e incluso si cambiamos de navegador de Internet.
Así no son pocos los usuarios que han reportado «serios problemas» a la hora de poder utilizar «navegadores tan populares como Firefox en un Mac, un ordenador en el que no podemos instalar Internet Explorer»
No obstante su interoperabilidad ha mejorado bastante, y poco tiene ya que ver con la complejidad técnica que tenía su utilización cuando el Gobierno lo presentó por primera vez hace casi tres años.
En este sentido se nota el trabajo que se está realizando desde diversos ministerios y ya son muchos los ciudadanos que aseguran que con cierta frecuencia realizan operaciones sin problemas.
Entre los ciudadanos que manifiestan una experiencia positiva tenemos el caso de Enrique Lodoza de 26 años que asegura que no esperaba «poder confirmar mi borrador de la declaración de la renta por internet. Solía tener que pedir permiso en el trabajo para acercarme a las oficinas de Hacienda, y ahora me basta con identificarme con mi DNI y confirmar que estoy de acuerdo».
Otro ejemplo que ilustra perfectamente el uso del DNI electrónico lo aporta Jorge Martinez, asalariado de 32 años que explica que hace unos meses cambió de trabajo y «en el momento de gestionar mi alta con la empresa me solicitaron con urgencia un Certificado de Vida laboral. En ese mismo momento utilizando el DNIe a través de la página web de la Seguridad Social, tras identificarme pude descargarme ese documento, imprimirlo y entregarlo ahorrándome el desplazamiento y la pérdida de tiempo».
Otro de los elementos en los que se ha trabajdo duramente es mejorar la forma en la que se puede solicitar el nuevo DNI. Todos recordamos como hasta no hace demasiado tiempo, la falta de organización de la administración pública y de las pocas comisarías de policía que se encargaban de expedir el nuevo documento, obligaban a formar interminables colas a la entrada de las comisarías. Colas que se formaban a horas intempestivas (las cinco de la mañana) y lo que es peor, no aseguraban el DNI a todo el mundo, sino sólo a un número determinado de personas por día.
Afortunadamente con la implantación de la cita previa, que puede solicitarse por teléfono, se ha mejorado mucho en este aspecto. Un ejemplo de lo eficaz que se ha vuelto este sistema nos lo proporciona Teresa Hernández, una funcionaria barcelonesa de 28 años: «La semana pasada estuve en la comisaría de mi barrio, y me sorprendió la velocidad con la que pude renovar mi DNI. Para evitar esperas, había pedido en la web una cita previa, y me encontré con que nada más llegar, prácticamente me estaban esperando. Me sorprendió gratamente que además pude cambiar mi PIN ahí mismo».
Como podemos observar, hay opiniones para todos los gustos. No obstante sí que reconocemos que pese a su gran utilidad y a la ventaja que supone frente al DNI electrónico tradicional, para muchas personas y empresas puede ser necesaria recibir formación previa para conocer de cerca todo el partido que pueden llegar a sacar de su nuevo documento.
Para todos ellos, para todos vosotros, os animamos a que os incribáis en las jornadas de formación organizadas por el Ministerio de Industria en las que en dos horas os explicarán todo lo que necesitáis saber y además, os regalarán un lector.
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