1. Combínalo con el Social Media
¿Irónico verdad? En la introducción de este artículo nos «quejamos» del auge del social media y ¿Qué ofrecemos como primera recomendación? Más social media. Sin embargo hay una buena razón para combinar ambas plataformas. Las marcas han demostrado que utilizar Twitter o Facebook para promocionar nuestra newsletter es más que una buena idea. Al revés, promocionar nuestra presencia en redes sociales en nuestros e-mailings suelen producir altas tasas de conversión.
2. Segmenta tu mercado
Muchas empresas suelen cometer el mismo error: envían un e-mail a toda una base de datos de contactos en la que no se discrimina ni se segmenta de ninguna forma. El resultado suele ser más que pobre, ya que junto a «amenazas» de denunciarnos por Spammers no acabamos de recibir un feedback adecuado sobre cómo ha funcionado nuestro envío,
En este sentido, antes de realizar un envío resulta más que recomendable realizar una segmentación en función de tipo de cliente, carcaterísticas demográficas, intereses, etc. Cuanto más «personalizado» sea el envío más posibilidades tendremos de que el destinatario quiera leer lo que tenemos que comunicar.
3. ¿Quiénes somos?
Según AdAge una de las publicaciones de referencia mundial cuando hablamos de publicidad y marketing, el 70% de los consumidores indican que el campo «De» motiva su decisión sobre abrir o ignorar por completo un e-mail. El 30% restante asegura en la misma encuesta que la decisión la toman en función del campo «Asunto». Cuidar al máximo estos dos campos es fundamental para el éxito de nuestra campaña.
4. Un pequeño incentivo
A todos nos gusta recibir algo especial en nuestro buzón de correo electrónico. Algo que vaya un poquito más allá que publicidad pura y dura. Detalles como un pequeño obsequio por el cumpleaños de nuestros suscriptores o un descuento en fechas señaladas pueden motivar que nuestros clientes lleguen a estar «encantados» con nuestros e-mails.
5. Adaptados a los terminales móviles
Cada vez más usuarios consultan su correo electrónico en dispositivos somo smartphones y tablets. Y es más, el consumo de e-mail en el móvil, según afirma Comscore, no para de crecer. Sólo en 2010 su uso creció en un 36% con respecto al año anterior. Con esto queremos decir que debe acarse para siempre esos envíos que son totalmente ilegibles desde un terminal móvil y hay que tener en cuenta las nuevas formas de consumo.
6. El mensaje más importante
Cuando preparamos un mail para terminales móviles (especialmente para smartphones) es importante situar el mensaje principal en la primera línea del cuerpo de texto ¿Por qué? porque suele ser los primero que muestran los móviles cuando están en modo «vista previa».
7. Anuncios y novedades
Los consumidores tienden a abrir con más facilidad un e-mail si en el «Asunto» del mismo se les anuncia algo que realmente tenga gancho, como pueden ser que quedan pocas unidades de un producto, que se anuncia un nuevo producto o que estamos poniendo en marcha una oferta por tiempo limitado.
8. Frecuencia y relevancia
En el mismo informe de Ad Age del que hablábamos antes, se nos indica que frecuencia y relevancia son dos de las claves que marcan nuestro éxito en nuesrtra estrategia de e-mail marketing. Por un lado, no podemos bombardear con e-mails diarios a nuestros lectores, pero por otro, no podeos ignorarlos por completo durante un largo periodo de tiempo.
Además, debemos hacer lo posible por que el contenido que enviemos sea realmente relevante, que tenga utilidad, sobre el cual el usuario pueda llevar a cabo una acción.
9. Engancha con la actualidad
El consumidor suele responder de forma positiva cuando una campaña está relacionada con un evento relevante. Navidad, Día del Padre, Rebajas, Vacaciones, Mundial de Fútbol etc. son sólo algunos ejemplos de cómo un evento puede realcionarse con nuestros productos, servicios y empresa.
10. Feedback
El feedback no se basa exclusivamente con cumplir con la Ley de Protección de Datos, sino facilitando la conversación entre empresa y usuarios. En nuestras campañas de e-mail deberíamos habilitar un espacio en el que los usuarios pudiesen enviarnos sus sugerencias, comentarios o preguntas técnicas sobre nuestros productos.
