Hay veces que la calidad, el diseño y una interfaz de usuario sobresaliente no son suficientes para ganarse el favor del mercado. Hay veces que es el buen hacer de una campaña agresiva de marketing, lo que consigue lo que no son capaces de hacer los mejores ingenieros. Es esta realidad y mucho nos tememos que no otra, la que ha marcado la relación de fuerzas entre HTC y Samsung durante los últimos 18 meses.
Sin embargo, tras la presentación del HTC One y Samsung Galaxy S4, las cosas podrían cambiar. Mientras que la marca coreana apuesta con su S4 por un smartphone esencialmente continuista (heredando lo mejor del S3 y apostando por nuevos servicios), la empresa taiwanesa pone sobre la mesa un terminal apabullante. Si quieres conocer todos los detalles del nuevo HTC One, no te pierdas el completo análisis que publicamos en MuyComputer.