Los expertos en marketing on-line, las empresas del sector y por qué no decirlo, también los periodistas, son expertos en hablar de tendencias, nuevas tecnologías y técnicas que prometen revolucionar la forma en la que se comunica y se vende en Internet. Y aunque es cierto que unas pocas acaban fraguando y se convierten en mainstream, muchas otras no producen ni mucho menos los resultados previstos. Hoy os queremos hablar de tres tendencias que iban a cambiarlo todo, pero que no han conseguido cambiar casi nada.
1. Los códigos QR
Llevamos años hablando de los códigos QR y de cómo pueden ayudar a las pymes a mejorar las ventas y los ration de conversión de su negocio. En MuyPymes también somos culpables. Escribimos artículos como «Cómo los códigos QR mejoran la imagen de tu empresa» o el mucho más explícito «Dale una segunda oportunidad a tus códigos QR».
Pero lo cierto es que pese al esfuerzo que han hecho las empresas, pocas personas se paran a escanear un código QR cuando tienen la oportunidad. En primer lugar porque no todos los usuarios tienen una app apropiada para leer estos códigos (normalmente hay que buscarla en la tienda de apps correspondiente) y en segundo término, los consumidores perciben que el objetivo de un código QR suele ser una venta, por lo que no se muestran muy entusiasmados a la hora de sacar el móvil y escanear.
El futuro de los códigos QR pasa por aportar valor añadido, como por ejemplo hace la EMT en Madrid, que al incluir estos códigos en las marquesinas de los autobuses, permite conocer a los usuarios en tiempo real cuánto tiempo falta para que pase el próximo autobús.
2. Los vídeos virales
Todos estamos de acuerdo que un vídeo viral genera mucho ruido, recibe millones de visitas y es ampliamente compartido y difundido en las redes sociales. Otra cosa es que el vídeo cumpla con su objetivo, que recordemos no es otro que convertirse en una futura venta a favor de la empresa que crea el vídeo.
Si miramos los vídeos más vistos de este año en Youtube, nos encontraremos con un viejo conocido: «First Kiss» de Tatia Pilieva, con más de 95 millones de reproducciones, muestra la reacción de 20 desconocidos a los que se les invita a besarse por primera vez.
Detrás de este vídeo se encuentra Wren una firma de moda que reconoció poco después en un nuevo vídeo protagonizado por su CEO que los personajes del vídeo eran en realidad actores pagados y que en realidad el vídeo quería servir como presentación de la nueva colección. Ese vídeo sólo tuvo finalmente 100.000 reproducciones y el tweet en el que se hizo el anuncio 450 retweets.
Es uno de los principales problemas con un vídeo viral. No sólo necesita una ejecución brillante sino una conexión profunda con la marca que lo «patrocina» en un equilibrio muy delicado que pocos son capaces de conseguir.
3. El SEO
Estamos de acuerdo en que posicionar bien en un buscador como Google es clave para que nuestros contenidos y nuestra marca tenga más exposición y relevancia. Y por supuesto hay prácticas que nos van a ayudar a mejorar nuestro posicionamiento SEO. En «Google y tu empresa: SEO» hacemos un breve recorrido de la historia del SEO y qué prácticas básicas nos van a ayudar a mejorar la forma en la que se nos indexa en Internet.
Y eso es todo lo que merece la pena hacer. Sobre-optimizar nuestros contenidos para el SEO o peor aún, contratar servicios externos que nos prometen un mejor posicionamiento a base de técnicas dudosas de SEO no sólo no va a jugar a nuestro favor sino que más bien va a hacerlo en nuestra contra.
Sobre todo porque sólo Google conoce a ciencia cierta cuáles son las claves de su algoritmo de búsqueda y se sabe, porque ha sido Google la que lo ha declarado de tal modo, que en cada nueva versión de su algoritmo luchan precisamente para penalizar el posicionamiento de las páginas que recurren a estas técnicas.
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