La innovación, dicen muchos, surge de una pequeña idea que somos capaces de transformar o adaptar, de forma que mejore nuestro negocio, o que provoque el nacimiento de uno nuevo. Dicho así, suena sencillo pero… ¿cómo innovar con éxito?
En MuyPymes hemos recogido el ejemplo de cinco pequeñas empresas que han sabido innovar, bien adaptando servicios que de alguna forma ya existían en el mercado, bien proponiendo ideas completamente nuevas. Y es que al aprender cómo innovan/crean los demás, quizás nuestra creatividad fluya con más facilidad.
1. Speed Dating para elegir a tu compañero de piso
Hace algunos años las agencias de contactos pusieron de moda una nueva modalidad para conocer «el amor de nuestra vida»: el speed dating. Básicamente de lo que se trata es de reunir a un grupo de personas que buscan pareja en una sesión, en la que cada cinco minutos se cambia de mesa (y de pareja) con el objetivo de conocer a una gran cantidad de posibles parejas en poco tiempo. Finalizada la sesión se rellenan unas «hojas de evalucación» y dependiendo del grado de compatibilidad la agencia se encarga de realizar los contactos oportunos.
Pues bien una empresa neozelandesa, Speedrentings ha adaptado este popular formato al mundo de los pisos de estudiantes, dirigiendo este servicio a jóvenes que buscan a otras personas para compartir pisos y gastos durante un tiempo determinado. Como en el caso de las «citas amorosas», Speedrenting organiza sesiones semanales en las que por poco más de seis euros cualquiera puede participar.
El precio incluye la logística del evento y una consumición gratuita para cada uno de los participantes. En este caso, la empresa reparte dos tipos de tarjetas que disponen un código personalizado, azules para aquellos que buscan un piso y rojas para aquellos que disponiendo de su propio apartamento quieren alquilar una habitación.
Terminada la sesión y durante las siguientes 24 horas, los participantes pueden escribir a la empresa (por e-mail o por SMS) indicando en los «códigos» en los que están interesados en realizar un segundo contacto.
Vanity Barcodes: ¿quién dijo que los códigos de barras tenían que ser aburridos?
¿Puede convertirse un «triste» código de barras en una gran herramienta de comunicación y marketing? En Vanity Barcodes, una pequeña empresa de New Jersey están convencidos que con un poco de imaginación es posible.
Tanto es así que desde hace casi un año están comercializando en su web diseños que imitando a animales y objetos cotidianos convierten al código en una pequeña pieza de arte con la que mejorar el diseño del packaging de todo tipo de productos.
En Vanity Barcodes aseguran que sus códigos funcionan perfectamente con cualquier lector óptico del mercado y ofrecen soporte para los formatos más utilizados tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea y Japón. El precio de cada código es un tanto elevado (375 dólares) pero si hemos de atender a la publicidad de su web corporativa, su lista de clientes no para de crecer.
Withings: ¿Qué ocurre cuando nos pesamos en una báscula con Wi Fi?
Hay que reconocer que si hay un sector en el que no se producen grandes revoluciones es en el de las básculas. Hace años que incluyen pantalla digitales e incluso las hay que son capaces de memorizar ciertos perfiles, pero no se puede decir que sea un sector realmente apasionante.
Hasta ahora. Withings una pequeña emprea francesa se ha propuesto revolucionar por completo el sector, y desde luego lo está consiguiendo. Su secreto es unir algo tan inocuo como una báscula a una conexión Wi Fi. El resultado es un gadget capaz de transmitir los «datos de pesada» a la web en tiempo real, identificando distintos perfiles y mostrando los rersultados en gráficas comparativas, de modo que podemos seguir nuestra «progresión a lo largo del tiempo».
La báscula puede reconocer el perfil de hasta ocho personas diferentes, identificando quien se encuentra sobre el aparato en función de su peso (y de su progresión). Además dispone de algunas características tan sofisticadas como su propia aplicación para el iPhone o la posibilidad de publicar nuestros resultados en Facebook y en Twitter.
SOccket: un balón de fútbol con el que además puedes recargar tu teléfono móvil
Casi 1.500 millones de personas viven en áreas en las que acceder a la electricidad es poco menos que una quimera. Tomando esta premisa como base sobre la que construir sus proyecto, un grupo de investigadores de la Universidad de Harvard ha creado sOccket, un balónde fútbol que almacena la energía que recibe al ser golpeado, tranformándola posteriormente en electricidad.
Normalmente cuando golpeamos una pelota de fútbol tradicional, toda la energía se disipa casi en el mismo momento en el que se produce el golpeo. Sin embargo, sOccket es capaz de almacenar dicha energía, ya que en su interior cuenta con un sistema de baterías recargables basadas en una tecnología muy similar a la que utilizan los relojes o las linternas que se recargan con el movimiento.
Cada 15 minutos de juego, sOccket almacena energía suficiente como para alimentar una pequeña lámpara LED durante tres horas, y tras una hora de juego, puede cargar un teléfono móvil.
Académie Culinary Wines: vinos de gourmet para cocinar
¿Quién dijo que los buenos vinos no sirven para cocinar? En la Académie Culinary Wines, una pequeña empresa de california aseguran que cocinar con un buen vino no es en absoluto echarlo a perder, sino que es mejorar el plato que estamos elaborando.
Evidentemente, no nos invitan a verter nuestro «Vega Sicilia» en la cazuela, sino de lo que se trata (y que han conseguido con éxito) es elaborar una serie de vinos que se adaptan de forma natural al plato que estamos preparando. Para ello han creado un sistema de clasificación cromática que imprimen en sus botellas. De esta forma lo que llaman «Blend 1» está destinado a mejorar las salsas para carne, el Blend 2 tiende a platos de pescado y aves, el Blend 4 a asados… etc.
Además, cada botella viene acompañada de un libro práctico de recetas en las que el vino es el protagonista, de modo que podamos sacar el máximo partido a nuestras facetas culinarias.