Un informe elaborado por el Instituto de Estudios Fiscales, el servicio de estudios del Ministerio de Hacienda, sobre las implicaciones que tendrá sobre el sistema público de pensiones la aplicación del llamado factor de sostenibilidad, revela que dichas medidas apenas servirán para retrasar en tres o cuatro años la quiebra del sistema y eso que, según sus cálculos, se traducirán en una disminución de 3.000 euros anuales en la pensión media que percibirán los futuro jubilados españoles, es decir, un descenso del 15%.
Si se quiere mantener el sistema público de pensiones, tal y como lo conocemos hoy la aplicación del factor de sostenibilidad, deberá recortar la cuantía de las nuevas pensiones de forma muy significativa. Pero este recorte no es pequeño. El ajuste necesario en la prestación media para acompasar los gastos esperados del sistema a los ingresos previstos sería de un 45%.
¿Se podría buscar otra solución para evitar una situación de mayor pobreza? En opinión del investigador del think tank de Hacienda y autor del informe, el profesor de la Universidad de Cantabria y experto en econometría, Ignacio Moral-Arce, entre las posibles alternativas es imperativo poner en marcha medidas que, por la parte de arriba de la pirámide poblacional, prolonguen la vida laboral de los trabajadores, y, por la de abajo, agilicen la incorporación de los jóvenes al mundo laboral.
