Microsoft ha confirmado en su página web que a partir de octubre de 2016 dejarán de venderse equipos con Windows 7 y Windows 8 preinstalado. Recordemos, que los de Redmond decidieron ampliar el período de comercialización de Windows 7, que se ha convertido en el segundo SO de la firma con más años en el mercado (nada menos que siete), sólo por debajo del exitoso Windows XP, que estuvo en tiendas durante nueve años.
A su vez, Windows 8 (lanzado el 26 de octubre de 2012) dirá adiós definitivamente apenas cuatro años más tarde sin haber conseguido que el público apoyara de forma masiva la nueva interfaz ‘Metro’. En el caso del soporte a cada uno de los sistemas operativos creados por Microsoft, este pasado enero finalizó el soporte masivo para Windows 7, aunque los usuarios y empresas que contrataran el soporte extendido seguirán recibiendo actualizaciones hasta enero de 2020. Lo mismo ocurre en el caso de su antecesor, Windows Vista, que pese a haber sido discontinuado en 2012, tendrá este tipo de soporte extendido hasta abril de 2017.
Por su parte, en el caso de Windows 8, Microsoft dejará de emitir actualizaciones y prestar soporte técnico a sus usuarios el próximo 9 de enero de 2018, alargando cinco años más su ciclo de vida en forma de soporte extendido hasta el 10 de enero de 2023. Por último, el recién estrenado Windows 10 llegará al fin de su ciclo de vida, siempre según los datos de Microsoft, el 13 de octubre de 2020.